Caminos antiguos, noveles caminos.
Caminos recónditos, caminos explorados.
Caminos distantes, caminos cercanos.
Cada vez que escucho a Loreena McKennitt, emprendo un viaje interior. Y ahora también me abono a la ruta sembrada que propone Abigail Horro Rodríguez, y los grupos a los que pertenece: Tricordes y Serpens Cauda.
La música de arpa, flautas, gaitas, violines, pianos, percusiones varias, zanfoñas e instrumentos antiguos, siempre es evocadora y ha provocado en mí una elevación inconsciente de mi espíritu.
Si además la letra es esclarecededora y la entona una voz cristalina, con una modulación genuina, clamorosa cuando es propicio que lo sea y rumorosa cuando la melodía lo requiere, el éxtasis es el corolario más plausible y el fruto más previsible que obtendremos.
Ese torrente vocal de Loreena McKennitt te subyuga, te vacía de lágrimas, te llena de sonrisas y te confirma que abandonarse a la Música te otorga alas incluso cuando más hundida te sientes…
Si te dejas llevar, nada será igual.
El sonido límpido, transparente, ancestral, remueve sensibilidades y resucita el ánima. Te hace viajar a otras épocas, te motiva para valorar o superar obsoletas tradiciones, te afina las intenciones, te positiviza los propósitos y te mece y acoge con una cadencia estética sin parangón.
Pero una vez más, el sempiterno intento de describir con palabras la Música sólo se puede conseguir parcialmente, es mejor vivirla en directo, dejándote sobrecoger con su fuerza magnética y su armonía universal.
Y cuál ha sido mi asombro al descubrir que no sólo Loreena McKennitt surte ese efecto en mí.
También Abigail Horro Rodríguez, y alguno de los grupos a los que pertenece, Serpens Cauda y Tricordes, realizan un trabajo de interpretación intachable y magistral, recuperando canciones y melodías medievales que surten un efecto estético y anímico asombroso sobre los que se entregan a una escucha atenta y activa.
Y es que todo es impermanente… pero la repercusión y la resonancia musicales son legados que nunca morirán y lo más extraordinario es que están al alcance de toda persona que esté abierta a su armonía sin fronteras.
Desde THEMCELVEZ agradezco de corazón a todas/todos las/los creativas/os de todas las artes su labor impagable.
Disfrutadlas.
Celia Estévez